Un verano en El Valle del Jerte con niños
Estamos en julio, después del confinamiento por la pandemia de COVID-19 y hemos elegido el Valle del Jerte para pasar unos días en contacto con la naturaleza, para descubrir los muchos rincones y paisajes que esconden las gargantas, cauces y senderos que abundan en estas tierras, como la maravillosa Garganta de los Infiernos, con sus Pilones, una de las joyas del lugar.
Hace calor, pero en el Valle del Jerte encontramos numerosas pozas, charcos cristalinos, cascadas en los que refrescarnos. El agua, sin duda, va a ser la protagonista de este viaje, porque solo apetece estar sumergidos en ella, o cerca, disfrutando de su frescor y del ambiente tranquilo que crea a su alrededor.
Tampoco vamos a renunciar a dar algún pequeño paseo, necesario para llegar a los lugares más mágicos, pero siempre fáciles de recorrer ya que vamos con una niña de 3 años. Todos los recorridos y propuestas se pueden hacer con niños, en familia. Esperamos que os guste nuestra aventura y que podáis disfrutar pronto de estos paisajes.
Índice de temas
- Cabezuela del Valle y sus piscinas naturales
- Apartamentos Tauro
- Piscinas Naturales de Cabezuela del Valle
- Garganta de los Infiernos, la joya del Jerte
- Ruta de acceso a Los Pilones en la Garganta de Los Infiernos
- Zonas de baño, pozas, marmitas y cascadas
- Regreso, Mirador del Chorrero y bosque de castaños
- Rutas en la reserva natural de la Garganta de Los Infiernos
- ¿Qué ropa o equipo necesitas?
- Garganta de las Nogaleras o Ruta de las Cascadas
- Sendero de la Garganta de las Nogaleras
- Zona Alta de las Cascadas
- Comentarios
Cabezuela del Valle y sus piscinas naturales
Apartamentos Tauro
En este reportaje nos alojamos en el pueblo de Cabezuela del Valle, precioso pueblo bañado por el río Jerte y cuyo casco histórico fue nombrado en 1998 como Conjunto Histórico Artístico.
Tenemos la suerte de contar con la colaboración de los Apartamentos Tauro, regentados maravillosamente por Ezequiel. Se trata de un edificio de apartamentos individuales equipados con todo lo necesario para una estancia cómoda.
Son la base ideal para conocer el Valle del Jerte, y visitar las joyas más visitadas del parque como la Garganta de los Infiernos, a solo 10 minutos en coche, las piscinas naturales de todos los pueblos de la zona e incluso el Valle de Ambroz y Plasencia.
Nuestro apartamento dispone de salón con cocina completa, habitación muy amplia con cama doble y baño. Aire acondicionado. Y lo más importante, a tan solo 3 minutos de una de las piscinas naturales del pueblo.
Piscinas Naturales de Cabezuela del Valle
El generoso cauce del río Jerte hace posible numerosas zonas de baño en las distintas poblaciones del valle. Este año, con las precauciones que hay que tomar debido a la pandemia del COVID-19, es un año excepcional, y algunas de las pozas no están habilitadas para el baño. Aún así, hay numerosos rincones del río a los que se puede acceder para bañarse, siempre guardando las distancias de seguridad entre familias y siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias en cada momento.
Nosotros te vamos a enumerar las piscinas naturales de Cabezuela del Valle. De algunas de ellas pudimos disfrutar el primer día de nuestro viaje, por la tarde cuando el sol apretaba más. Las piscinas suelen estar habilitadas desde mediados de junio hasta mediados de septiembre.
Piscina Natural La Pesquerona:
Se encuentra junto a la Oficina de Turismo de la Mancomunidad y cuenta con zonas de arena y césped, sombra, chiringuito y parque infantil (este año 2020 clausurado por el COVID). Tiene zona de aparcamiento y no están permitidos los perros.
Piscina Natural El Simón:
Al lado de la anterior, un poco más abajo, con los mismos servicios y comodidades que la Pesquerona.
Piscina Natural La Picaza:
No tiene tantos servicios como las anteriores y por ello es algo más tranquila. Se accede por un carril hormigonado o por unas escaleras y ocupa el río desde el puente romano hasta la siguiente piscina El Vao.
Piscina Natural El Vao:
Situada en la parte baja del pueblo a la altura del colegio, cuenta con terrazas de hierba y bastante sombra.
No hay nada mejor que hacer en verano que bañarse en las aguas del Jerte en las muchas piscinas que existen a lo largo de todo el cauce, ¡te animamos a que las descubras!
Garganta de los Infiernos, la joya del Jerte
El segundo día de nuestra estancia queremos visitar la Garganta de los Infiernos para bañarnos en la zona de "Los Pilones", unas marmitas circulares formadas por la erosión del río que tienen forma de bañera gigante, y que son una de las joyas del Valle del Jerte.
Amanece un día de calor bastante sofocante, con previsión de temperaturas cercanas a los 40 grados. Es sábado y madrugamos un poco para llegar temprano, ya que, con las medidas de precaución por la pandemia del coronavirus, el acceso a esta ruta está regulado y limitado. Son días extraños. Accedemos al medio natural con mascarilla y guardando las distancias con otras personas. Pero aún así, llevamos la ilusión de disfrutar del entorno.
Llegamos antes de las 10 a la zona del aparcamiento. Sábado, de mediados de julio, con la amenaza de posibles confinamientos, cualquier sitio se encuentra con mucha afluencia de personas.
Así que no estamos seguros de sí podremos aparcar siquiera. Entramos con el coche hasta el Punto de Información de la Reserva Natural. Pasado éste, hay un parking de un bar en el que hay bastante sitio y no nos lo pensamos. El precio son 3€. Quizá en alguna parte del acceso hubiera habido algún hueco, pero mejor no dar demasiadas vueltas y no nos parece mal pagar.
Ruta de acceso a Los Pilones en la Garganta de Los Infiernos
Para llegar a la zona de Los Pilones tenemos que caminar unos 3 kilómetros por un sendero señalizado y fácil. En el inicio de la ruta nos reciben dos operarios para informarnos de que se acaba de completar el aforo, pero que podemos pasar.
Nos dan una serie de indicaciones, como intentar no estar demasiado tiempo para que otros puedan acceder también y que el regreso lo hagamos por la pista que baja por un frondoso castañar.
La ruta de aproximación es en subida por un bonito bosque de roble melojo, con manchas de helechos. Sin dificultad, vemos familias con niños directamente preparados para darse un chapuzón en las frescas aguas que bajan por la garganta. Seguimos las indicaciones. Hay varios cruces, pero no tiene pérdida porque está bien señalizado. Realizaremos una bajada por un camino empedrado y enseguida estaremos en el puente.
Zonas de baño, pozas, marmitas y cascadas
El sendero llegará a un puente, bajo el cual ya encontramos numerosos bañistas. Y desde ahí hacia arriba, encontramos muchas pozas y márgenes donde podemos poner la toalla.
La verdad que, con niños pequeños, la mejor opción es quedarse en las pozas que hay a partir del puente (hacia abajo), ya que de esta forma no tendremos que remontar por terreno pedregoso.
Pasado el puente, el sendero continúa en subida, paralelo a los pilones. Nosotros subimos para tener conocimiento visual de la zona y hacer unas fotos. Llegamos a un punto donde todavía hay pozas, pero ya es difícil avanzar. Aquí decidimos que lo mejor es volver a la zona del principio.
Hay gente en todos los pilones. Tienen un aspecto muy atractivo y con lo fresca que tiene que estar el agua dan ganas de meterse ya. Algunas personas realizan descenso por los pilones y las pequeñas cascadas que los unen. Es muy divertido, pero a la inversa, remontar, es complicado porque hay zonas que resbala mucho.
Tras ubicarnos en una buena zona para Alma, con sombra cerca y poca profundidad comprobamos lo fresquita que está el agua y como de fuerte pega el sol a la vez. Uno de nosotros decide ir a fotografiar las pozas de los pilones, mientras el otro se queda jugueteando en el agua con la pequeña.
Estamos un rato, picamos algo y decidimos regresar para dar oportunidad a otras personas que no han podido acceder por aforo.
Regreso, Mirador del Chorrero y bosque de castaños
Remontamos la cuesta y llegamos a la bifurcación por la que hemos subido. Poco después vemos el Mirador del Chorrero, una impresionante cascada que a estas alturas del verano ya se ha secado.
Poco después nos encontramos con la entrada al castañar, en forma de galería y con plena sombra. Ni en nuestros mejores pensamientos nos habíamos imaginado tan cómodo regreso teniendo en cuenta el calor que está haciendo. La verdad que se agradece esta sombrita. Imaginamos que esta ruta en otoño también tendrá su encanto al discurrir por un hermoso castañar.
Tras cuarenta minutos estamos de nuevo en el punto de inicio.
Rutas en la reserva natural de la Garganta de Los Infiernos
En total hemos recorrido unos 7 km. con unos 260m de desnivel acumulado de subida (ac+). Existe la posibilidad de realizar una ruta más larga de unos 12 km. señalizada con marcas amarillo y blanco que recorre las zonas más representativas de la reserva natural. Sin embargo, al hacer tanto calor, estar limitado el aforo y también como vamos con una niña, esta opción hubiera resultado más difícil y complicada.
¿Qué ropa o equipo necesitas?
Es fundamental llevar un calzado deportivo cómodo para recorrer el sendero y que agarre bien con suela de montaña a ser posible, ropa cómoda, agua y algo de comer. Para la zona de Los Pilones, en verano, no olvides bañador, toalla y calzado tipo escarpines para no hacerse daño en el cauce del río.
Tampoco está de más, un gorro, gafas de sol y protección solar. Imprescindible cámara de fotos, ya que la zona te va a enamorar y querrás tener un recuerdo. Recomendable un teléfono móvil para cualquier emergencia.
Garganta de las Nogaleras o Ruta de las Cascadas
Si el sábado habíamos descubierto la maravillosa ruta de la Garganta de los Infiernos, el domingo nos plantamos en Navaconcejo para conocer la Garganta de las Nogaleras o también conocida como la Ruta de las Cascadas. Y qué maravilla de paisaje, nos gustó tanto o más que la anterior, ¡que preciosidad de entorno! ¡que caídas de agua! ¡qué pozas más cristalinas! Te lo contamos.
Este entorno combina senderismo, baños y posibilidad de barranquismo, ya que la garganta esta equipada para su descenso en esta modalidad. Existe un recorrido largo, de unos 6 km. y uno corto de unos 4 Km. que es la opción más fácil si vas con niños o personas que no están acostumbradas a caminar.
Se puede hacer con niños o personas mayores, aunque debemos tener en cuenta que tiene mucha subida y el terreno no es fácil, ya que hay bastante piedra. Es muy empinada, ya que subiremos 350 metros en unos 2 Km. Por tanto, aunque el sendero está muy bien señalizado y equipado con pasamanos, barandillas de madera y demás, se trata de un recorrido para el que se necesita un esfuerzo y una habilidad.
Sendero de la Garganta de las Nogaleras
En la localidad de Navaconcejo, hay un aparcamiento habilitado para las personas que se acercan a la garganta de las Nogaleras, muy cerca del punto en que las aguas de este arroyo vierten al río Jerte.
El sendero asciende por el margen derecho del río, al principio suavemente y después más empinado. Siempre en sombra, y señalizado con marcas verde y blanco, discurre entre nogales a orilla del agua, algunos robles, muchas plantas trepadoras, helechos, chopos, fresnos y vegetación de ribera que le dan un toque selvático al paseo.
Vemos la primera cascada, a la que podemos acercarnos bastante para sentir la fuerza de la caída del agua. Se abre un sendero por repisa para acceder a la parte superior de la cascada. Mucha precaución en este punto para no resbalar, ya que puede estar mojado el suelo.
La segunda cascada nos parece un lugar idílico, una gran caída de agua y una poza que invita al baño. Hace bastante calor y mucha humedad, no hay nadie en las inmediaciones, y no podemos resistirnos a la llamada del agua, nos quedamos en bañador y nos metemos en la profunda poza, con el agua bastante fresca. Después nos enteramos que este lugar se llama el Charco del Paraíso, y realmente se merece este nombre. Nunca olvidaré este baño refrescante en un entorno increíble.
Después del baño, el camino sigue en zigzag muy empinado hasta que llegamos a la tercera cascada donde hay una presa para captación de agua. Un cartel nos advierte de que a partir de este punto hacia arriba no podemos bañarnos.
La cuarta cascada llega en pocos minutos y sale un sendero para acercarse a ella, pero hay que tener cuidado de no resbalar, porque está zona está algo expuesta.
Poco después, llegaremos a la carretera donde ya podemos iniciar la bajada al aparcamiento, o bien podemos continuar subiendo hacia la 'zona alta de las cascadas'.
Zona Alta de las Cascadas
Hemos optado por seguir subiendo por la zona alta. Accedemos al sendero por unas escaleras que nos llevan a un mirador desde donde podemos ver la quinta cascada algo escondida a la derecha.
El sendero se asoma a otras dos cascadas muy bonitas y llegamos a un puente metálico que tenemos que cruzar y desde el cual podemos ver de cerca la sexta cascada. Más adelante nos encontramos con otro puente que nos sitúa en la parte alta de la cascada anterior y en la base de la séptima y última cascada.
Queremos hacer una advertencia y es que justo después del primer puente metálico, en un árbol, había un avispero justo por donde pasaba el sendero, y tuve la mala suerte de parar un momento justo en este árbol, lo que trajo como consecuencia un ataque de avispas, que me picaron en la cabeza en varias ocasiones.
Y ese fue el motivo de que me perdiera la última cascada ya que corrí hacia arriba hasta alejarme del lugar, sobre todo para evitar que le picaran a Alma, que la llevaba en la mochila. ¡Suerte que no le picaran a ella! Porque era realmente doloroso.
Después del pequeño susto, continuamos la ruta, ya en bajada admirando las laderas llenas de cerezos y el pueblo abajo.
Al finalizar podemos disfrutar de un buen baño en las pozas del río Jerte cerca del comienzo de la ruta. También hay un pequeño parque infantil y chiringuito para recuperar fuerzas.