Sea Life Benalmádena, el acuario para ir con niños en la Costa del Sol
Un plan perfecto para ir con niños en la Costa del Sol es visitar Sea Life Benalmádena, en Puerto Marina. Es un acuario bastante completo donde podrás ver no solo especies marinas, sino también habitantes de las selvas tropicales y de los ríos y lagos.
Sea Life Benalmádena está muy enfocado para recibir visitas de niños, aunque también despertará la curiosidad de los adultos más curiosos, entre los que nos incluimos. Es muy divertido e instructivo ver cómo alimentan a los animales ¡incluyendo los tiburones!
Y algo que nos ha encantado es que una vez que sacas tu entrada, tienes todo el día para disfrutar del acuario, puedes entrar y salir las veces que quieras con tu entrada ¡es genial! De esta forma, puedes ver las actividades que hay a lo largo del día, como la alimentación de las diferentes especies.
Índice de temas
- La Visita al acuario Sea Life Benalmádena, en familia
- La Isla de las Rayas, ¿quieres darles de comer?
- Zona interactiva, ¡manos al agua!
- Túnel Jurásico, ¡vas a ver tiburones de cerca!
- Las famosas pirañas y otros peces de río
- Llegamos a la casa de Nemo
- La última sorpresa, la nutria Óscar
- ¡Hasta otra!
- Comentarios
La Visita al acuario Sea Life Benalmádena, en familia
Observar los peces es una de las cosas más relajantes y maravillosas que existen, de eso no hay duda, y no digamos el hipnótico baile de las medusas ¡increíble experiencia! Por eso, y por muchas más razones hemos ido a ver Sea Life, en Benalmádena (Costa del Sol), un acuario muy completo y con muchos detalles para los más curiosos.
Si además vas acompañado de un niño, te transmitirá la emoción de ver las cosas por primera vez y será una experiencia muy enriquecedora ¡te lo aseguramos! Eso es lo que nos ocurrió a nosotros cuando llevamos a Alma a Sea Life.
La visita puede llevarte una hora aproximadamente, pero te recomendamos que te tomes más tiempo, porque el acuario tiene muchos detalles que descubrir, mucho que observar y actividades diarias tan interesantes como la alimentación de los tiburones, o de las rayas.
La entrada te sirve para todo el día, puedes entrar y salir las veces que quieras con un sello que te ponen. Las cosas buenas hay que disfrutarlas despacio, y por eso es mejor que te lo tomes con calma. Para los más curiosos, Sea Life ha dispuesto muchos paneles informativos para leer, y también pantallas táctiles con información sobre las especies.
Llegamos a la puerta y un ascensor nos baja hasta la recepción - tienda donde podemos comprar las entradas. Aquí nos darán un juego que podemos ir completando, y al final de la visita, si has respondido todas las preguntas, te dan una pequeña sorpresa ¡para los peques!
La primera sala que nos encontramos está dedicada al Mediterráneo y podemos ver especies muy comunes en nuestras costas: doncellas, pargos, sargos o lubinas, nadando en aguas del mediterráneo que entra directamente del mar. Los tanques están muy bien acondicionados con flora y elementos de la zona: rocas, arena... y decorados con paisajes de fondo que lo hacen muy vistoso.
La Isla de las Rayas, ¿quieres darles de comer?
Llegamos a la primera atracción del acuario, la Isla de las Rayas, donde hay varias especies de rayas (águila, guitarra...) algunas de ellas las han traído los pescadores porque resultan dañadas y ya no pueden vivir en el mar.
En este punto, si es momento de su alimentación, puedes comprar comida para ellas y alimentarlas tú mismo, ¡verás lo simpáticas que son!
El horario es lunes, miércoles y viernes a las 12:30 h.
Zona interactiva, ¡manos al agua!
Se trata de unos tanques abiertos donde podemos tocar algunas especies. Y otras te tocan a ti, como las gambitas que te limpian las impurezas de las manos. También cuenta con unas cámaras que se introducen en el agua y podemos ver en tiempo real los animales en una gran pantalla: anémonas, gusanos de mar, erizos...
La zona de las medusas le encantó especialmente a Alma, se quedó mucho rato mirándolas cómo nadaban. El pulpo nos observa desde el fondo de su escondrijo. Él come a las 14 h. (se puede ver lunes, miércoles y viernes).
Entramos en la casa de algunos animalitos que no están sumergidos en el agua, como los insectos palos, ¡a ver si eres capaz de distinguirlos! También encontramos un camaleón y un lagarto, y una impresionante serpiente pitón arborícola verde, ¡esta sí que da un poquito de repelús!
Túnel Jurásico, ¡vas a ver tiburones de cerca!
Viajamos en el tiempo hacia el Jurásico, y, a través del esqueleto de un plesiosaurio (reproducción), iremos descubriendo poco a poco a los únicos descendientes vivos de aquella era, los tiburones. En la zona de excavación arqueológica, los más peques podrán jugar a desenterrar huesos de dinosaurios y créeme, que esto les encanta a ellos.
Antes de entrar al túnel, encontraremos algunas sorpresas, como algunos ejemplares del famoso pez payaso, protagonista de "Nemo"y también maravillosos caballitos de mar, ¿sabías que es el macho el que tiene a las crías en su barriga?
Y por fin, entramos al túnel de tiburones, donde el tiburón de punta negra de arrecife o la tortuga verde nadan imponentes por encima de nuestras cabezas, ¡una experiencia alucinante!
Alguno de los más grandes escualos hasta se atreve a enseñarnos su barriga. Algunas de las especies más grandes se encuentran en esta zona: tiburón gato, tiburón nodriza, tiburón cebra. También encontramos especies más pequeñas como ángel de anillos azules, cirujano emperador o pargo emperador rojo.
Las famosas pirañas y otros peces de río
Salimos del mar para sumergirnos en el Amazonas, donde tenemos peces de todo tipo, más pequeños y más grandes, y las famosas pirañas, unas omnívoras y otras solo carnívoras. Esta parte está realmente bonita porque todos los elementos que aparecen en los tanques son propios de este tipo de ecosistema, y es muy diferente a lo que estamos acostumbrados a ver: ramas, troncos, plantas submarinas... Impresionante la rana de punta de flecha azul, ¡muy venenosa!
Después llegamos a una placita que es un balcón al tanque de tiburones y aquí pueden pasar los minutos y no te das cuenta, observando el hipnótico movimiento de los peces y los escualos. Puedes sentarte en unos bancos muy oportunamente colocados. ¡Ah, y hacerte muchas fotos! eso sí, sin flash, porque puedes asustar a los animales, y además no te saldrían bien por los reflejos de los cristales.
Llegamos a la casa de Nemo
Si has visto la película Nemo, aquí vas a reconocer la casa de Nemo y Marlin, en el arrecife, coloridos corales, anémonas, pez payaso, pez cirujano (la famosa Dory) y otras especies supercoloridas ¡esto a los niños les alucina!
Otra curiosidad, la anguila jardinera, ¡muy graciosa! con su cuerpecito enterrado en la arena y asomando curiosa su cabeza.
Pasamos por unos divertidos espejos con diferentes efectos, donde puedes hacerte fotos, siendo más delgado o más rechoncho.
Y para despedirnos de Sea Life, las maravillosas estrellas de mar, donde los más peques podrán verlas muy de cerca a través de un sistema de túneles por donde pueden pasar para acercarse más a ellas.
La última sorpresa, la nutria Óscar
Hemos llegado a tiempo para asistir a la alimentación de la nutria, Óscar, que son los más comilones del acuario. No paran de moverse y por eso necesitan comer mucho. Y tienen una alimentación de lo más variada, carne, pescado y frutos secos. Él come cada día a las 11, a las 13 y a las 15 h.
¡Hasta otra!
En definitiva, Sea Life Benalmádena es un acuario muy entretenido para los niños y muy completo para los adultos curiosos. ¡Repetiremos!
No te conformes con leerlo, tienes que visitar el acuario Sea Life Benalmádena. Y si te quedas con ganas de más, puedes sacar el pase anual, que sale súper económico y puedes ir las veces que quieras durante un año.
Nosotros nos llevamos de recuerdo un peluche pulpo de la tienda de Sea Life, ¡nos enamoramos de él! Y Alma eligió un Nemo mordedor, súper simpático.